El gusano de la harina (Tenebrio molitor) se presenta como una potencial alternativa para la biodegradación de plásticos, contribuyendo así a un modelo de reciclaje sostenible y una economía circular. |
Los residuos plásticos se han convertido en una preocupación mundial debido a la alta demanda y los efectos medioambientales adversos que estos generan.
En la actualidad se producen entre 80 y 100 toneladas de polietileno y poliestireno en todo el mundo. Con estos plásticos se fabrican objetos tan comunes como bolsas de la compra, envases para alimentos, juguetes, y otra amplia infinidad de productos.
Gracias a que es un material resistente y económico, ha fomentado el crecimiento de su uso en las ultimas décadas. Sin embargo, muchos de estos objetos son utilizados una sola vez a lo largo de su ciclo de vida útil, y en el caso de una simple bolsa de la compra puede tardar alrededor de 400 años en degradarse.
Papel de los insectos en el proceso de biodegradación de plásticos
Numerosos insectos como los gusanos de la harina amarillos (larva de Tenebrio molitor), los gusanos de la harina oscuros (larva de Tenebrio obscurus), gusanos de la cera (larva de Galleri mellonella), entre otros, son capaces de llevar a cabo la degradación del polietileno y el poliestireno gracias a una enzima que se encuentra en su intestino, capaz de metabolizar las estructuras de estos plásticos.
Tenebrio molitor ¿insecto o planta de reciclaje?
El intestino del gusano de la harina amarillo (Tenebrio molitor) es capaz de secretar factores emulsionantes que ayudan a los microbios intestinales y contribuye a la biodegradación de los plásticos.
Aunque podría sorprender, la larva del Tenebrio molitor demuestra una sorprendente capacidad no solo para sobrevivir, sino también para completar su ciclo de vida integral (que abarca desde la fase de larva hasta la de pupa y, finalmente, la etapa de escarabajo) alimentándose exclusivamente de polietileno y/o poliestireno.
Este hecho subraya la notoria adaptabilidad de esta especie a una dieta basada específicamente en un material plástico, revelando su asombrosa capacidad de aprovechar recursos de manera inusual y sostenible.
No obstante, según los hallazgos de una investigación llevada a cabo por la Universidad de Stanford y la Universidad de California, se ha constatado que el proceso de biodegradación del polietileno experimenta un notable aumento cuando, a la ya mencionada monodieta centrada en el polietileno, se incorporan otros subproductos, como, por ejemplo, la cascarilla del trigo, abriendo así nuevas perspectivas para abordar la gestión sostenible de residuos plásticos.
Revalorización del plástico gracias al Tenebrio molitor
Después de que el Tenebrio molitor consume el plástico, se generan dos productos de considerable interés y utilidad:
- Larvas: estas larvas resultan ser interesantes debido a que se ha descubierto que poseen propiedades que las convierten en una fuente potencialmente viable de biocombustible.
- Frass: se refiere a las heces obtenidas del proceso digestivo del Tenebrio molitor. Estas heces poseen un valor significativo en el ámbito agropecuario. Su aplicación en la agricultura destaca debido a los diversos beneficios que aporta al cultivo, contribuyendo al enriquecimiento del suelo y mejorando las condiciones para el desarrollo de las plantas.
Por todo ello, se logra una reducción significativa en la cantidad de residuos plásticos presentes en la capa terrestre. Además, se promueve el aumento de los subproductos derivados del Tenebrio molitor, generando beneficios tanto económicos como medioambientales.
Este método contribuye a la sostenibilidad al aprovechar los recursos de manera más eficiente y al mismo tiempo ofrece oportunidades rentables desde una perspectiva económica y respetuosa con el medio ambiente.
Referencias
Lou, Y., Li, Y., Lu, B., Liu, Q., Yang, S. S., Liu, B., … & Xing, D. (2021). Response of the yellow mealworm (Tenebrio molitor) gut microbiome to diet shifts during polystyrene and polyethylene biodegradation. Journal of Hazardous Materials, 416, 126222.